adultos que leen cuentos con los niños

¡Cuánto disfrutamos acurrucándonos con nuestros hij@s para leer un cuento!

Esta acción no sólo es una experiencia placentera para nosotros sino que, al convertirlo en un hábito diario, es una fuente de aprendizaje inmensa y muy variada para nuestros niñ@s.

Hay expertos que aconsejan hacerlo ya durante el embarazo ( igual que escuchar música) pues desde el 5º mes de gestación el bebé ya es capaz de percibir y reconocer voces y sonidos,y en el 6º mes el oído está desarrollado totalmente.

Nosotros usamos trucos que hacen nuestra lectura más positiva:

  • Leer sin prisa: la lectura es un tipo de juego y como tal requiere atención, emoción e interacción, ponerle los 5 sentidos.
  • Usar lenguaje no verbal y gestos para acompañar la lectura. Así reforzamos la compresión de los contenidos y manteniendo su atención más tiempo.
  • Escoger la lectura adecuada. Todas las historias se grabarán en su cabeza, las reinterpretará y tomará ejemplo de alguna de ellas, por eso es importante tener en cuenta su edad, sus gustos y sus intereses.
  • Cambiar las formas de leer un cuento. Añadir onomatopeyas ( efectos sonoros), preguntarle cosas para que participe en la lectura (ejemplo: ¿qué llevará Caperucita en esa cesta? ¿qué crees que le gustará a la abuelita?), pararse en detalles distintos cada vez, usar marionetas ( aunque sea un calcetín), etc.

 

Que beneficios les ofrecemos a nuestros hij@s con la lectura:

Estimulamos la imaginación, sensibilidad, curiosidad y memoria.

Desarrollamos el lenguaje.

Educamos en la empatía al transmitir valores.

Instruimos en la Resolución de conflictos al  descubrir pautas para afrontar retos y miedos.

Reforzamos su autoestima.

Ayudamos a mejorar su atención y concentración.

Potenciamos nuestro vínculo personal con ellos.